sábado, 16 de julio de 2016

En Mi Eterno Soliloquio

Hoy en día es muy común ser de pocos amigos, con el tiempo la confianza y fidelidad parecen desvanecerse pasando a ser obsoletas. Los anti-valores han inundado la sociedad a tal punto de que la desconfianza es la única amiga fiel; pasamos los días cuestionando la veracidad del aire que respiramos. Sin embargo, no todo es negativo, siempre he dicho que todo tiene su pro y su contra, en este caso hemos podido desarrollar la habilidad de crear filtros para obtener la mejor selección de amigos que se pueda tener. No hablo de personas perfectas, eso seria una falacia; sino de las personas que con sus virtudes y principalmente con sus defectos, pueden marcar positivamente nuestra vida y viceversa.



Entre tanto, sigo hablando conmigo misma, evaluando situaciones y buscando respuestas, eventualmente me incorporo a la comunicación sana interpersonal con alguna de mis pocas amigas; ¡sí! yo también soy de pocas amigas. Entiendo perfectamente el poder del trabajo en equipo, pero siendo franca confío más en que si me equivoco podre levantarme y avanzar. ¡Siento que bailo mejor al son de mi propia coreografía! 


Me gusta pensar que hago ejercicio mental con cada uno de mis soliloquios. Es como leer un libro de genero distinto cada día; dependiendo de la situación en que me encuentre estaré frente a una novela dramática, una comedia, acción y suspenso e incluso terror absoluto. Es divertido estar a solas y tener mucho en que pensar, muchas ideas que quizás puedan materializarse y convertirse en éxitos, ¿quien sabe?... 


Quizás es complicado alcanzar este estado de éxtasis en solitario, cuando no estas sola realmente; me refiero a que nunca lo estamos, porque siempre nos demanda atención  el mundo que nos rodea. En mi caso tengo mucho a que prestar atención, ahora mismo tengo en la habitación de al lado a cuatro niños en edad escolar que demandan algo diferente cada cinco minutos, pero en el interludio puedo concentrarme con mi ser y seguir en mi propio mundo solo con un poco de interés. No se puede obtener algo si realmente no te interesa o no lo deseas con todas tus fuerzas. Afortunadamente para mí, ¡Amo estar conmigo misma! Y siento que es lo que me mantiene en equilibrio y me brinda la fuerza necesaria para enfrentar el mundo a mi alrededor. 


Si cualquiera se detiene un instante a considerar mi teoría puede concluir en que es algo lógico, ¿Quién puede ser más confiable y saludable para alguien, que sí mismo? pero muy frecuentemente aún siendo muy contradictorio se presenta la situación en donde el peor enemigo de alguien es sí mismo... Se requiere mucho control, autoestima y mucho sentido común para ser el director, productor y protagonista de nuestra propia existencia. Por esto, me esfuerzo cada día por mantenerme en mi eterno Soliloquio...


EB